Trabajo digno, salario justo

Terminadas las intervenciones del CEO en los diferentes territorios, su discurso no ha recogido el más mínimo gesto de recompensa económica hacia la plantilla. Ni siquiera se ha mostrado dispuesto a escuchar y negociar nada sobre una cuestión que tiene sobre la mesa hace meses, lo que sin duda resta credibilidad a una parte de su discurso.

Pese a la valoración positiva que teníamos sobre este exigente ejercicio de comunicación, la ausencia de cualquier gesto nos obligó a iniciar ayer jueves una serie de movilizaciones para recordar a quiénes nos dirigen que no vivimos de los aplausos o las palabras huecas, necesitamos realidades. Queremos un trabajo digno y un salario justo.

Las palabras del propio CEO avalan esta petición y solo falta un ápice de coherencia y justicia en sus futuras actuaciones para que ese sentimiento de pertenencia al que tanto se implora sea completo. Si Ibercaja quiere ser el mejor sitio para trabajar, hagan el favor de escuchar. En estas cosas, de verdad, no tomen decisiones solos porque no suelen acertar.

A esta movilización estaban invitados el resto de los sindicatos desde siete días antes de su celebración pero ninguno se ha sumado esta vez.  Nuestra puerta sigue abierta por si quieren sumarse en el futuro. Por nuestra parte, aportaros la certeza de que hay una parte de la representación sindical, que esperamos crezca, que no se resigna, que no se queda en la circular de consumo interno y que da la cara. Esperamos que cada día seamos más.