El Sentir de la Plantilla de caja

Queremos reproducir lo que pasa por la cabeza de un/a compañero/a cualquiera que ocupa el puesto de caja…

“Ayer se envió por parte de las oficinas la plantilla con el cobro del quebranto de moneda. Yo he estado los 365 días del año en mi oficina, que tiene un horario reducido de caja hasta las 11:00. El/La directora/a tecleó los 365 días, marcando el total de cobro de normativa, correspondiente a un importe de 638 eur. Me ha sorprendido, para mal, que mi jefe/a de zona llame a la oficina preguntando si no habíamos recibido un correo con instrucciones de prorratear ese importe en función de las “horas” que, según indicaron en un correo de compensación, “la persona que haya estado todo el año en caja: 38,20% de la jornada manejando efectivo, habría que comunicar 365 días*38,20%= 140 días, que equivaldría a un importe de 224,58 eur aprox.”. Según ha indicado el/la jefe/a de zona, va a modificar lo comunicado por la oficina para transmitir la modificación.

En un año en el que a los jefes se les llena la boca con los beneficios y el buen trabajo de los empleados, es increíble que nos racaneen 400 eur de una nómina, después de no querer subirnos el sueldo, de no reconocer nuestro trabajo, de maltratarnos no autorizando las novaciones de los préstamos de los empleados hasta octubre, momento en que subieron las condiciones de financiación, y de tratarnos, gracias, como al mejor cliente, pero no como a los buenos empleados/trabajadores que somos.

Lo peor es que en este caso es el propio jefe de zona el que teclea, que eso duele más, cuando es alguien que viene a la oficina, que te conoce personalmente, que sabe cómo trabajas y que no es capaz de dar curso a algo que sale en normativa, que está recurrido y que, en caso de que alguien le llamara la atención, podría defender a capa y espada por el apoyo que directamente tengo en la consecución de “sus propios objetivos”.

Cada vez en este barco hay más patrones y menos remeros y, aun así, no paran de fustigarnos. No sé si se dan cuenta de que, si hay pocos remeros y maltratados, el barco se hundirá”.

Desde UGT añadimos que, con la invención de compartir empleadxs de caja varias oficinas, la entidad ya había reducido considerablemente el número de quebrantos, pero no fue suficiente, esta Dirección rasca de todas partes para llenar sus bolsillos.

Es increíble, indignante, pero que no lo olvide el CEO y su Consejo de Administración: si apaleas a un perro, guarda bien la mano…